Francisco Canaro |
Fue además, pionero del jazz en Argentina junto con René Cóspito y Eleuterio Yribarren a mediados de los años 1920 y a comienzos de los años 1930.
Era apodado Pirincho porque al nacer la partera exclamó al ver la forma de su pelo: "¡Parece un pirincho!", aludiendo a un pájaro encrestado común del Río de la Plata.
Desde muy temprana edad la familia de Canaro se instaló en Buenos Aires, donde vivieron en conventillos. Antes de cumplir los 10 años él trabajaba en las calles.
Se destaca el hecho que construyó su primer violín empleando envases de aceite de la fábrica donde trabajaba. Dicho violín de lata le serviría para iniciar su carrera y ganar dinero suficiente para comprar uno de madera. Su hazaña pudo haber inspirado al grupo musical argentino Les Luthiers, quienes emplean violines de lata con frecuencia.
“El primer tango que saqué de memoria fue "El llorón", de autor anónimo, recordaría muchos años después. “El estuche me lo fabricó mi vieja; en realidad una funda de género, y ya salí a ganar algo de plata en bailes de la vecindad”.
Fue vecino del bandoneonista Vicente Greco. Canaro reconocería tiempo después lo que influyeron en él los conocimientos de Greco.
En 1908 empezó a actuar de forma continua en varios lugares de La Boca, y luego, conjuntamente con Greco en diversas giras.
En 1912 comenzó Canaro su trascendental labor de compositor con los tangos "Pinta brava" y "Matasanos".
En 1918 luchó por los derechos autorales, no reconocidos en esos tiempos, hasta culminar en la creación de la actual SADAIC (Sociedad Argentina de Autores y Compositores de Música), fundada en 1935 y cuyo edificio fue construido sobre terrenos adquiridos por Canaro.
En diciembre de 1932 graba el "Himno al Club Atlético River Plate", junto a su Orquesta Típica.
Sus temas más conocidos fueron: "Sentimiento gaucho", "Yo no sé qué me han hecho tus ojos" (1933), "Madreselva" (1940), "Adiós, pampa mía", coautor junto con Ivo Pelay y Mariano Mores (1945), "Pinta brava" (1912), "Sufra", "La última copa", "Soñar y nada más", "Mano brava", "El alacrán", "Dos corazones", "El internado", "Destellos" (1942), "Se dice de mí" (1943).
Cuenta en su haber con casi un centenar de discos, y con más de 50 películas como compositor, actor y productor.
En 1940 se nacionalizó argentino. Fue uno de los que más contribuyó a la extensión y popularidad del tango en Europa.
Tango: Tiempos viejos
Música: Francisco Canaro
Letra: Manuel Romero
Intérprete: Néstor Fabián
Las letras de Tango reflejan la vida misma. Reflejan el dolor, el placer, la nostalgia, alegrías y tristezas. A través de ellas te invito a pensar!
Letra:
¿Te acordás, hermano? ¡Qué tiempos aquéllos!
Eran otros hombres más hombres los nuestros.
No se conocían cocó ni morfina,
los muchachos de antes no usaban gomina.
¿Te acordás, hermano? ¡Qué tiempos aquéllos!
¡Veinticinco abriles que no volverán!
Veinticinco abriles, volver a tenerlos,
si cuando me acuerdo me pongo a llorar.
¿Dónde están los muchachos de entonces?
Barra antigua de ayer ¿dónde está?
Yo y vos solos quedamos, hermano,
yo y vos solos para recordar...
¿Dónde están las mujeres aquéllas,
minas fieles, de gran corazón,
que en los bailes de Laura peleaban
cada cual defendiendo su amor?
¿Te acordás, hermano, la rubia Mireya,
que quité en lo de Hansen al loco Cepeda?
Casi me suicido una noche por ella
y hoy es una pobre mendiga harapienta.
¿Te acordás, hermano, lo linda que era?
Se formaba rueda pa' verla bailar...
Cuando por la calle la veo tan vieja
doy vuelta la cara y me pongo a llorar.