lunes, 21 de septiembre de 2015

Feliz aniversario, Manuel Romero

Manuel Romero
Manuel Romero, nació el 21 de septiembre de 1891 en Buenos Aires, República Argentina. Fue dramaturgo, letrista de tango y director de cine y uno de los creadores del teatro de revista; como letrista de tangos, consiguió numerosos éxitos perdurables a lo largo del tiempo.

Los letristas de tangos que han conseguido numerosos éxitos perdurables a través del tiempos, no son más de diez o doce, y entre ellos debe figurar Manuel Romero. Baste recordar estos títulos: "Aquel tapado de armiño", "Buenos Aires", "El rey del cabaret", "El Rosal", "El taita del arrabal", "Estampilla", "Haragán", "La canción de Buenos Aires", "La muchacha del circo", "Nubes de humo", "Patotero sentimental", "Polvorín", "Tiempos viejos", "Tomo y obligo". Además, Carlos Gardel le grabó 19 temas.

También podemos recordar otras canciones como: "La marcha de la armada", "El vino triste", "Tres recuerdos", "La canción del camino", "Dime mi amor", "Isabelita", "Las vueltas de la vida", "Quemá esas cartas" y tantas otras hasta llegar a las 150 letras. Escribió más de 180 piezas teatrales, la primera de las cuales fue Teatro breve en 1919, con la colaboración de Ivo Pelay. 

Siendo un adolescente, comenzó su labor periodística en la revista Fray Mocho y en los diarios Crítica y Última Hora. Su personalidad era la del prototipo del porteño y por esa razón, el tango lo llevaba consigo, muy adentro.

Estudiante, y empleado después, en la Escuela de fogoneros de la Armada, vivió la siguiente situación que vale como anécdota. En oportunidad que un periodista y un fotógrafo de la prestigiosa revista Fray Mocho, visitaban la Escuela para realizar una nota, Romero se entromete con el fotógrafo indicándole los mejores ángulos para su trabajo. El periodista se molesta y le pregunta cuando tiempo lleva en la Escuela. A lo que le contesta: «Diez años». El ofendido le espeta: «Yo llevo 20 de periodistas dedíquese al carbón que yo se de lo mío». En eso un compañero se le acerca y lo llama por su nombre. El de la revista se sorprende y pregunta si tiene que ver con el que escribe en Fray Mocho. Ante la respuesta afirmativa el asombro de Félix Lima, el notero de marras, quien admiraba sus pinceladas porteñas, pero desconocía a su compañero de trabajo.

En 1922 dirigió su obra más conocida y exitosa, “El bailarín del cabaret”.

Romero viajó a Francia en 1923 junto a Luis Bayón Herrera, célebre director español. Se quedó allí por un tiempo, donde hizo algo de teatro en París. Allí conoció a Carlos Gardel, el célebre cantante de tango. A Gardel no le era desconocida la industria del cine: ya había trabajado en 1917 en la ópera prima de Francisco Defilippis Novoa, Flor de durazno, y había sido dirigido por Eduardo Morera en 9 películas, todas de 1930. Gardel y Romero decidieron hacer una película juntos, y en 1931 se estrenó Luces de Buenos Aires, escrita por Romero y su amigo Bayón Herrera y dirigida por el chileno Adelqui Migliar.

En 1933 se unió a la productora Lumiton. Se disputa cuál fue la primera película de Romero. Fuentes apócrifas señalan 2 películas anteriores a su estrellato de 1935: “La pura verdad” (1931) y “¿Cuándo te suicidas?” (1932). De cualquier forma, su ópera prima fue “Noches de Buenos Aires” (titulada en referencia a su previo trabajo con Gardel). Romero dirigió la película, y escribió el argumento junto a Bayón Herrera. Éste volvió a colaborar como escritor en su segunda película, “El caballo del pueblo” (1936). Prosiguieron “La muchachada de a bordo” y “Radio Bar” (ambas 1936), “Fuera de la ley”, “El cañonero de Giles” y “Los muchachos de antes no usaban gomina” (todas 1937).

1938 marcó el estreno de “Tres anclados en París”, película de contenido controversial -el título original de “Tres argentinos en París” debió ser cambiado en Argentina-, y “La rubia del camino”, la primera "road movie" argentina. Ese año marcó su primera colaboración con Niní Marshall, en Mujeres que trabajan. Destacadas de 1939 son La vida es un tango y “Los Muchachos se divierten”. Ese mismo año realizó la primera de una trilogía protagonizada por Niní Marshall y Enrique Serrano: Divorcio en Montevideo. La siguieron “Casamiento en Buenos Aires” (1940) y “Luna de miel en Río” (1941).

Se dedicaría a realizar películas el resto de su vida. Dirigió más de 50 películas en total, la mayoría de las cuales según su propio argumento y compuso la música. Se trataban de películas sencillas, con temática sobre el tango: rodaba rápidamente con el sólo afán de terminar la producción, y recibió el rechazo de la crítica y el público selecto. No obstante desarrolló estilo propio, y se le reconoce como uno de los pioneros del cine argentino. Siguió rodando películas en los 40s y tempranos 50s, notablemente “La historia del tango” (1949).

Dirigió a Tito Lusiardo, su actor fetiche, así como Niní Marshall, Paulina Singerman, Juan Carlos Thorry, Enrique Serrano, Luis Sandrini, Narciso Ibáñez Menta, Luis Arata, José Gola y Juan Carlos Thorry entre otros.

Estuvo casado con Ida Boyd únicamente, con quien tuvo un único hijo. Sus otros amores fueron entre otras Elena Bozán y Mary Parets, pero con ninguna de ellas se casó ya que nunca se divorció de su esposa Ida.

Hoy a la distancia resulta, en realidad, el testimonio de toda una época, sin pretender la rigurosidad del documento, nos dejó una pintura, una acuarela de los diferentes sectores de la sociedad de los años '30 y '40. Además de dejarnos un verdadero documento, en lo que respecta a actores, cantores, actrices y cancionistas de cuerpo entero y no solamente a través del disco.

Una noche estaban reunidos varios amigos después de una cena. Romero contaba el argumento de su próxima película que era igual a todas las anteriores, y cuando llegó el momento de relatar que la heroína es seducida y luego desdeñada por el malo, uno de los concurrentes dijo sin pensarlo: «Sí, y después canta un tango». Romero se ofendió y contestó en voz alta: «Sí, cantará un tango, porque yo lo siento así y así lo siente el pueblo para quien escribo y dirijo.»

Y esto era absolutamente cierto.

Obras (Director)
Uéi Paesano (1953)
El patio de la morocha (1951)
El hincha (1951)
Derecho viejo (1951)
Juan Mondiola (1950)
Valentina (1950)
Morir en su ley (1949)
La historia del tango (1949)
Mujeres que bailan (1949)
Un tropezón cualquiera da en la vida (1949)
La Rubia Mireya (1948)
Porteña de corazón (1948)
El tango vuelve a París (1948)
Navidad de los pobres (1947)
Adiós Pampa mía (1946)
El diablo andaba en los choclos (1946)
Hay que casar a Paulina (1944)
La calle Corrientes (1943)
El fabricante de estrellas (1943)
Historia de crímenes (1942)
Ven... mi corazón te llama (1942)
Elvira Fernández, vendedora de tienda (1942)
Una luz en la ventana (1942)
Mi amor eres tú (1941)
El tesoro de la isla Maciel (1941)
Yo quiero ser bataclana (1941)
Un bebé de París (1941)
Luna de miel en Río (1940)
Isabelita (1940)
Los muchachos se divierten (1940)
Carnaval de antaño (1940)
Casamiento en Buenos Aires (1940)
Muchachas que estudian (1939)
Gente bien (1939)
Divorcio en Montevideo (1939)
La modelo y la estrella (1939)
La vida es un tango (1939)
Mujeres que trabajan (1938)
La rubia del camino (1938)
Tres anclados en París (1938)
La vuelta de Rocha (1937)
Fuera de la ley (1937)
La muchacha del circo (1937)
Los muchachos de antes no usaban gomina (1937)
El cañonero de Giles (1937)
Radio Bar (1936)
Don Quijote del altillo (1936)
La muchachada de a bordo (1936)
El caballo del pueblo (1935)
Noches de Buenos Aires (1935)

Guionista 
Uéi Paesano (1953)
El patio de la morocha (1951)
El hincha (1951)
Valentina (1950)
Morir en su ley (1949)
La historia del tango (1949)
Mujeres que bailan (1949)
Un tropezón cualquiera da en la vida (1949)
La Rubia Mireya (1948)
Porteña de corazón (1948)
El tango vuelve a París (1948)
Navidad de los pobres (1947)
Adiós Pampa mía (1946)
Hay que casar a Paulina (1944)
La calle Corrientes (1943)
El fabricante de estrellas (1943)
Historia de crímenes (1942)
Ven... mi corazón te llama (1942)
Elvira Fernández, vendedora de tienda (1942)
Una luz en la ventana (1942)
Mi amor eres tú (1941)
El tesoro de la isla Maciel (1941)
Yo quiero ser bataclana (1941)
Un bebé de París (1941)
Luna de miel en Río (1940)
Isabelita (1940)
Los muchachos se divierten (1940)
Carnaval de antaño (1940)
Casamiento en Buenos Aires (1940)
Muchachas que estudian (1939)
Gente bien (1939)
Divorcio en Montevideo (1939)
La modelo y la estrella (1939)
La vida es un tango (1939)
Mujeres que trabajan (1938)
La rubia del camino (1938)
Tres anclados en París (1938)
La vuelta de Rocha (1937)
Fuera de la ley (1937)
La muchacha del circo (1937)
Los muchachos de antes no usaban gomina (1937)
El cañonero de Giles (1937)
Radio Bar (1936)
Don Quijote del altillo (1936)
La muchachada de a bordo (1936)
El caballo del pueblo (1935)
Noches de Buenos Aires (1935)

Autor 
Los muchachos de antes no usaban gomina (1969)
La muchachada de a bordo (1967)
La calle Corrientes (1943)
El tesoro de la isla Maciel (1941)
La muchacha del circo (1937)
Los muchachos de antes no usaban gomina (1937)

Música 
Tango! (1933)

Temas musicales 
El fabricante de estrellas (1943)
Nubes de humo (1958)
Luna de miel en Río (1940)
Isabelita (1940)
La vida es un tango (1939)
La rubia del camino (1938)
Tres anclados en París (1938)
La muchachada de a bordo (1936)

Tango: Tiempos viejos
Música: Francisco Canaro
Letra: Manuel Romero
Intérprete: Julio Sosa




Las letras de Tango reflejan la vida misma. Reflejan el dolor, el placer, la nostalgia, alegrías y tristezas. A través de ellas te invito a pensar!

Letra:
¿Te acordás, hermano? ¡Qué tiempos aquéllos!
Eran otros hombres más hombres los nuestros.
No se conocían cocó ni morfina,
los muchachos de antes no usaban gomina.
¿Te acordás, hermano? ¡Qué tiempos aquéllos!
¡Veinticinco abriles que no volverán!
Veinticinco abriles, volver a tenerlos,
si cuando me acuerdo me pongo a llorar.

¿Dónde están los muchachos de entonces?
Barra antigua de ayer ¿dónde está?
Yo y vos solos quedamos, hermano,
yo y vos solos para recordar...
¿Dónde están las mujeres aquéllas,
minas fieles, de gran corazón,
que en los bailes de Laura peleaban
cada cual defendiendo su amor?

¿Te acordás, hermano, la rubia Mireya,
que quité en lo de Hansen al loco Cepeda?
Casi me suicido una noche por ella
y hoy es una pobre mendiga harapienta.
¿Te acordás, hermano, lo linda que era?
Se formaba rueda pa' verla bailar...
Cuando por la calle la veo tan vieja
doy vuelta la cara y me pongo a llorar.